04 febrero 2006

Homenaje a las portadas de los libros

Con motivo de la celebración del 60 aniversario de la editorial Edhasa, las paredes de la Galería Maria José Castellví (Consell de Cent, 278. Barcelona) albergan hasta el próximo 11 de febrero una peculiar exposición del diseñador gráfico Jordi Sàbat (Palafrugell, 1960). Esta muestra, que recibe el nombre de Año Sabático, es todo un homenaje a las portadas de los libros. A partir de las cuarenta ilustraciones que expone este gran ilustrador, se ha seguido un proceso editorial inverso al habitual: inventar una nueva obra literaria para cada portada. Cada una de estas ilustraciones se ha convertido en la portada de un inexistente libro, añadiendo otra vuelta de tuerca al proceso habitual de creación de una obra literaria.
La exposición está tan bien estructurada que el visitante disfruta con la lectura de los hipotéticos libros. Cada ilustración tiene a su lado una maqueta de tamaño real con la cubierta del libro, su correspondiente título, nombre del autor y sello de la editorial Edhasa.
Tras visitar esta excelente exposición, nos preguntamos si deberíamos considerar la ilustración de una portada de un libro como una obra de arte. Si la ilustración pertenece a un reconocido artista y se presenta en el entorno de una galería de arte de prestigio, entonces la crítica suele considerarla como una obra de arte. Desgraciadamente, en la mayoría de los casos, la crítica suele considerar la ilustración como un mero elemento visual para transmitir el contenido literario, siendo la verdadera obra de arte la propia obra literaria.

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