16 octubre 2006

La responsabilidad de los escritores

Pocos intelectuales, filósofos y escritores alemanes se han disculpado públicamente por su falta de crítica o por su acercamiento al régimen nazi. En un momento en que la confesión del escritor Günter Grass ha desatado todo tipo de comentarios en toda Europa, nos preguntamos si los escritores deben ser un referente social y moral (como conducta frente al mundo que perciben) ante la sociedad.
Muchas personas han cuestionado la veracidad e intencionalidad del arrepentimiento público de Günter Grass aduciendo que se trata de una mera estrategia de creación de polémica para promocionar su nuevo libro. Considero que esta insinuación es muy despreciable, pues este escritor no tiene necesidad de campañas de comunicación para promocionar sus libros, pues se venden solos.
Günter Grass podía haber pasado a la Historia sin disculparse públicamente por sus devaneos con el nazismo, al igual que otros escritores como Ernst Jünger, el filósofo Heidegger, entre otros, pero valientemente ha decidido dar la cara y hacer un ejercicio de honradez con un alto coste personal de desprestigio social y moral. Puede que la polémica haya derivado en una mayor venta de libros, pero sólo él puede evaluar el “coste” del rechazo social que está sufriendo.
Sandra Ellegiers señala en el artículo que publica hoy en Babelia que “la exitosa venta del libro pone de relieve que los lectores revisan lo que los intelectuales debaten en la plataforma pública, los medios, y revela aún más, que la cuestión de la culpa alemana es más que un sujeto científico”.
En relación con este fenómeno social de culpa, la Editorial Melusina acaba de publicar “Heidegger en la tormenta”, de Marcel Conche. Su propósito es liberar a Heidegger de la sospecha de nacionalismo. Para lograrlo, el autor analiza de nuevo los indicios y demuestra que no hay nada más ajeno al pensamiento heideggeriano que la locura del Tercer Reich. Para ello, se sirve de las conferencias y seminarios del filósofo alemán en la década de los treinta –muchos de ellos inéditos en español– para apuntalar su caso.
Frente a las posturas tremendistas y sensacionalismos que hemos vivido con el caso Grass, este libro que nos brinda una excelente reflexión sobre el caso Heidegger, que nunca hubiera sido escrita por Conthe si el filósofo se hubiera arrepentido públicamente. Ambos casos nos invitan a reflexionar sobre para qué sirve la filosofía y sobre la responsabilidad de los escritores frente a sus lectores.

1 Response

  1. Precisamente hace unos días comentába con una colega esta circusntacia de Heidegger, le decía esto justamente, que «no hay nada más ajeno al pensamiento heideggeriano que la locura del Tercer Reich», pero nada logró convencerla. Le recomendaré el libro.

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