El poder de las recomendaciones en la Red
Volvemos con la influencia y el poder de las recomendaciones online para las ventas. Como nos cuentan en el Washington Post, incluso hay gente casi adicta las opiniones y a las votaciones en Amanzon, que ya cuenta con más de 10 millones de recomendaciones y reseñas en su plataforma. Mucha gente que dedica su tiempo libre a dar su opinión o valoración de determinado libro, disco o videojuego. Estas menciones son un reflejo del tradicional “boca-oreja” o “de boca en boca” que supuestamente tienen un impacto directo en las ventas. Algunas de estas personas utilizan estos sistemas de valoraciones como su particular blog de opinión. Los mejor posicionados, más influyentes y prolíficos tienen su propio espacio personal en la Web donde señalan los libros que están interesados en recibir de los editores para hacer después algún tipo de reseña.
Un ejemplo más de que poder real de una comunidad de usuarios y lectores en Internet puede ser mucho mayor que opiniones supuestamente autorizadas o de renombre. Hasta tanto llega el poder de la valoración del usuario en la red. Puntuaciones que valoran otros usuarios y que Amazon también considera, tanto como para haber creado Amazon Encore.
Pero también tan importantes y de clara influencia como para que algunas editoriales -como contábamos la semana pasada a propósito del caso Elsevier – y otras empresas “fuercen” las valoraciones positivas e intenten comprar o recompensar por las tan deseadas cinco estrellas en Amazon junto a buenas críticas.
No cabe duda de que en la red, los usuarios siguen siendo los mejores y más fiables prescriptores, a pesar de todo.
Hay que luchar para que siga primando «el poder de las recomendaciones» por sobre «las recomendaciones del poder». Depende, en buena medida, de nosotros como atentos consumidores y usuarios.
Julián Chappa
La verdad es que, por desagradables que resulten, en ocasiones, los comentarios de los usuarios, al final somos nosotros los destinatarios de cualquier producto que sale al mercado. ¿Qué menos, pues, que podemos valorar la calidad de los mismos? Además, para su fabricante o autor debe ser una guía inequívoca hacia la excelencia, no una crítica destructiva. Tratando de ocultar los defectos o carencias, comprando, incluso, buenas referencias, lo único que se consiguen son muchos clientes por una sóla vez, pero su fidelización….porque, en definitiva, el consumidor, será quien decida si vuelve a invertir en un producto determinado o no, digan las «estrellitas» de Amazon y otros baremos lo que digan.