Robots en las bibliotecas
Leemos una noticia que parecía de ciencia ficción si no fuera porque ya existen: robots para ayudar en las bibliotecas, dando un paso más allá de lo que entendemos habitualmente por tecnologías en las bibliotecas.
Robots de algo más de un metro que ya se han usado en el ámbito educativo para aprender código y a programar de manera práctica y divertida con los estudiantes más jóvenes.
Los dos primeros, Vicent y Nancy, comenzarán su nuevo trabajo a partir del octubre, el día de la lectura de Star Wars (La Guerra de las Galaxias), una fecha muy propicia.
La idea es que en el ámbito bibliotecario también enseñen a programar y otro tipo de habilidades informáticas. Un tipo de formación que nos puede sonar un poco rara de enseñar en bibliotecas pero que es habitual en Estados Unidos.
Los robots van dotados de dos cámaras, cuatro micrófonos, sensores de movimiento, reconocimiento de sonido y facial, sentido del tacto y un sonar para detectar paredes.
Más adelante quieren que estos robots puedan entablar conversaciones –pueden hablar hasta en 19 idiomas-, contar historias o recitar poemas.
Es decir, llevar la interrelación con este tipo de inteligencia artificial a un terreno más humanístico.