26 octubre 2006

Pepetela

Coincidiendo con la inauguración de la cuarta edición de la Mostra Portuguesa en Madrid, la editorial portuguesa Texto Editores publica en España la novela El tiempo de los flamencos de Pepetela, seudónimo de Arthur Carlos Mauricio Pestana dos Santos nació en Benguela (Angola) en 1941.
Es uno de los nombres más conocidos de la literatura actual en lengua portuguesa: un escritor muy conocido y reconocido que en 1997 recibió el Premio Camões, la distinción equivalente al Premio Cervantes en la lengua española. Su obra literaria ha sido objeto de amplia atención por parte de numerosos estudiosos y de un altísimo nivel de valoración tanto por la crítica como por los lectores.
La biografía de Pepetela es, en gran parte, la historia contemporánea de Angola. Participó en el Movimiento Popular de Liberación de Angola (MPLA), vivió el exilio y luchó como guerrillero por la liberación de su país. Tras terminar su licenciatura en Sociología enseña en la universidad angoleña y ha desempeñado altos cargos políticos en el Ministerio de Educación.
La IV Mostra portuguesa convoca este año una amplia oferta cultural luso-española. Hasta el próximo 7 de noviembre, el certamen que incluye la presencia y participación de reconocidas figuras del teatro, el cine, la música, la ciencia, el arte, la literatura y la gastronomía.
Agustina Bessa-Luis, Lidia Jorge y Pepetela participarán esta tarde (19 horas) en una mesa redonda que organiza la Biblioteca Nacional de Madrid para debatir sobre Portugal/África: la visión del otro.


El tiempo de los flamencos
Como todas las novelas de Pepetela, ésta también se caracteriza por un estilo vibrante, hipnótico, potente y cuasi mágico. A partir de sus propias y poderosas herramientas, el autor desgrana la historia de una familia, los Van Dum, que desempeña un papel clave en la colonización de Angola. Nos situamos en el siglo XVII y África es un hervidero de culturas y civilizaciones, una promesa y un continente por construir.
Allí estarán los portugueses y también los españoles, los flamencos y los propios habitantes del país. La mirada del esclavo que acompaña siempre al patriarca Baltazar Van Dum, una mirada tierna, aparentemente neutra y al mismo tiempo reveladora del proceso en que se larva el deseo de independencia humano y nacional, es el testigo perfecto que transmite el acontecer (matrimonios, amores, conquistas y desgracias) de un grupo y una determinada etapa histórica.
Además de todo lo dicho, El tiempo de los flamencos es mucho más que una novela histórica: también es la historia de una familia, de un país, de una época y de sentimientos universales como el amor, la traición o la ambición. De tal manera que Pepetela alcanza con esta novela uno de sus muchos logros literarios: ampliar las fronteras de su aguda capacidad de retratar, narrar y contar.

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