¡Que viene Kindle!
El próximo jueves 21 de agosto doy una conferencia sobre el impacto del libro electrónico en el sector editorial en el curso de verano ¿Quién paga la cultura? Del canon digital a la industria del español, que se celebrará en la UIMP (Santander). Esta conferencia forma parte de la sesión La muerte de Gütenberg: los nuevos retos de la edición, que cuenta con la participación de Emiliano Martínez, del Grupo Santillana; Beatriz de Moura, de Tusquets Editores, y Oriol Castanys, de RBA.
El pasado 1 de agosto, uno de los blogs más influyentes de los Estados Unidos, TechCrunch, publicó un post donde anunciaba que Amazon había vendido 240.000 unidades de su soporte de lectura de libros electrónicos Kindle desde su lanzamiento el pasado mes de noviembre. En sólo 10 días acaban de actualizar esa información indicando que estiman que este año se venderán 378.000 unidades, otras 934.000 unidades en 2009 y superarán los 4,5 millones de unidades en 2010 debido al lanzamiento de una versión de Kindle para centros escolares y bibliotecas.
Los soportes de lectura de libros electrónicos, como Kindle, I-Liad o Papyre, son ya una realidad; por tanto, la estrategia y el enfoque de la digitalización de las editoriales será una de las decisiones más importantes que tendrán que tomar a corto-medio plazo.
Actualización: Resumen de mi conferencia, desgraciadamente con algunos datos erróneos, publicado en un artículo publicado en La Vanguardia.
¡Javier, yo quiero oír esa conferencia!
¿Está previsto un vídeo o algo así?
Es que tiene muy buena pinta…
Un abrazo.
Martín.
A mi también me gustaría asistir a la conferencia. Mi duda, realmente, más que en los cacharros, está en la gente. Si les ha costado pagar en la tienda iTunes por algo que «no tocan», ¿pagarían por libros cuyas páginas no pasarán? Quizá depende la difusión de la propia capacidad de pirateo que tengan los libros. A mi me encantaría tenerlo ya, pero no tengo tan claro que la gente lo comprenda aún.
Evidentemente, estamos asistiendo a una revolución semejante a la de la transformación de los rollos en códices. Estoy segura de que las nuevas tecnologías pronto se verán reflejadas en una transformación de la literatura misma.