Evolución del préstamo digital en España
Así como la semana pasada publicamos un análisis comparativo sobre la evolución del préstamo digital en varios países, esta semana nos centraremos en analizar los últimos datos a los que hemos tenido acceso sobre el nivel de préstamo de ebooks en las redes de bibliotecas públicas de España.
Evolución de eBiblio
Aunque todavía es pronto para sacar conclusiones determinantes, y más aún para ponerse a comentar críticamente los resultados de esta primera fase, los primeros datos de la plataforma eBiblio indican que el uso del servicio de préstamo de ebooks en España es bajo en comparación con los resultados iniciales de otras plataformas similares en el mundo.
Desde la puesta en funcionamiento de eBiblio, hace escasos meses, 24.672 usuarios de los 10,2 millones de titulares de bibliotecas públicas en España que tienen acceso a la plataforma han utilizado el servicio de préstamo digital. Lo interesante es que estos primeros pioneros lectores digitales han realizado 78.838 préstamos a través de la plataforma. Las comunidades autónomas de Aragón, Castilla La Mancha, Ceuta, La Rioja, Madrid y Navarra son las que mayores índices de lectores digitales tienen en relación con el resto de comunidades.
Préstamos | Usuarios activos | |
Andalucía |
13.722 |
4.098 |
Aragón |
3.650 |
1.126 |
Canarias |
2.045 |
698 |
Cantabria |
970 |
302 |
Castilla y León |
7.753 |
2.447 |
Castilla La Mancha |
6.197 |
1.993 |
Ceuta |
409 |
142 |
Comunidad de Madrid |
24.076 |
6.872 |
Comunidad Foral de Navarra |
3.217 |
1.029 |
Comunidad Valenciana |
3.222 |
1.346 |
Extremadura |
2.587 |
782 |
Galicia |
4.097 |
1.472 |
La Rioja |
1.690 |
552 |
Principado de Asturias |
3.046 |
954 |
Región de Murcia |
2.157 |
859 |
TOTAL |
78.838 |
24.672 |
(Datos a 1 de marzo de 2015) | ||
Los motivos por los que en algunas comunidades autónomas veamos mayores índices de préstamos, así como de conversión de lectores digitales, se debe a que los bibliotecarios de estas comunidades se han tomado muy en serio el fomento de la lectura digital dándolo a conocer activamente entre sus usuarios y dinamizando con diferentes actividades el préstamo digital.
Análisis comparativo de ratios de conversión de lectores digitales
Aunque los primeros datos en España sean bajos en comparación con otras iniciativas internacionales, están en línea con lo que ocurrió en otros países en los albores de sus plataformas. A la hora de comparar y analizar los siguientes ratios de conversión de lectores digitales no debemos olvidar que las plataformas internacionales llevan ya entre 3 y 5 años prestando ebooks, por lo que los ritmos de adopción de lectura en pantallas en las diferentes plataformas y países son diferentes. No obstante, este tipo de análisis comparativo sirve para determinar el camino que nos queda por recorrer.
Plataforma – Ratio de conversión de lectores digitales
PretNumerique (Quebec): 6,91%
Biblioteca Pública de Nueva York (Estado Unidos): 3,33%
MediaLibrary (Italia): 3.0%
Atingo (Suecia): 1,5%
eLiburutegia (Euskadi): 0,70%
eBiblio (España): 0,24%
Dada la mencionada diferencia de tiempos de prestación de servicios, la única plataforma con la que podemos realizar un análisis comparativo más realista de la evolución de eBiblio es con la plataforma eLiburutegia del País Vasco.
eLiburutegia, la plataforma de la Red de Bibliotecas Públicas del País Vasco
En menos de tres meses de vida, la Biblioteca Digital de Euskadi (eLiburutegia) ha prestado ya un total de 5.900 libros digitales entre los más de 570.000 socios de la Red de Lectura Pública de Euskadi. En este breve tiempo de operativa, 3.976 socios de la Red se han dado de alta en la nueva plataforma generando un ratio de conversión del 0,7%. Estos resultados son significativos si los comparamos con los resultados de las anteriores plataformas internacionales mencionadas que llevan muchos más años prestando servicio a sus usuarios. Una de las claves del éxito de esta plataforma es la fuerte apuesta por el fomento de la lectura en pantallas a través de un amplio y diverso catálogo de ebooks que supera ya los 5.000 títulos, y que espera duplicar en breve.
Cómo fomentar una mayor demanda de lectores digitales
Más allá de estos ratios, que tal y como hemos dicho anteriormente no son los únicos ni los más singulares a la hora de analizar la evolución del préstamo digital en bibliotecas públicas, lo verdaderamente importante es cómo podemos fomentar una mayor demanda de lectura en pantallas en ambas plataformas. Afortunadamente, el punto de partida de eBiblio y eLiburutegia es muy bueno dado que la experiencia de la mayoría de los usuarios ha sido muy positiva en ambas plataformas.
A lo largo de los últimos días, hemos mantenido múltiples conversaciones con bibliotecarios y editores sobre estos datos de uso con el fin de conocer sus opiniones sobre los mismos. Compartimos a continuación algunas de las observaciones y sugerencias para enriquecer el debate sobre la evolución y los retos del préstamo digital en España.
1) Ampliar la diversidad del catálogo de ebooks. En la mayoría de las conversaciones, la diversidad de la oferta de préstamo de ebooks fue uno de los temas más comentados. Para los bibliotecarios, así como para los editores, una de las principales claves para fomentar el préstamo digital bibliotecario en nuestro país es ofrecer un catálogo de ebooks más amplio y diverso.
El modelo inicial de lotes de eBiblio parece ser que no ha dejado muy satisfechos ni a los bibliotecarios, ni a los editores. Por un lado, los bibliotecarios indican que en esos lotes no está todo lo que necesitan ofrecer para atender correctamente la demanda de sus usuarios; y, por otro lado, muchos de los editores, que no han conseguido que sus títulos formen parte de los lotes adjudicados, se sienten excluidos del proyecto.
2) Mayor involucración de los bibliotecarios. Más allá de poseer un amplio y diverso catálogo de ebooks, muchos profesionales nos han señalado que lo verdaderamente importante es contar con el apoyo y entusiasmo del colectivo de los propios bibliotecarios. Sin su apoyo, estos proyectos de préstamo digital nunca llegarán a consolidarse.
Son muchos los bibliotecarios que se han encontrado con escasa formación sobre cómo realizar un préstamo en una tableta o cómo llevar a cabo una renovación, entre otros procesos. Al desconocer su funcionamiento, no se sienten cómodos recomendando el servicio a sus usuarios. Los bibliotecarios abogan por poner en marcha un amplio programa de cursos de formación y actividades de dinamización de la lectura en pantallas con el fin de que puedan recomendarlo activamente a sus usuarios. Los editores deberían agradecer a los bibliotecarios de eBiblio y eLiburutegia el enorme esfuerzo que están haciendo por formar a cada uno de sus usuarios para gestionar la complejidad que conlleva la descarga de ebooks con DRM de Adobe. En otras palabras, están ayudando a reducir la piratería al convertir a esos lectores en usuarios del préstamo digital de bibliotecas.
3) Modelo de compra de licencias. Otro de los temas recurrentes en las conversaciones sobre el préstamo de ebooks gira alrededor del actual modelo de compra de licencias. Muchos bibliotecarios consideran que el actual modelo de compra de licencia con caducidad de dos años reduce la voluntad de comprar un mayor número de ebooks para generar una mayor demanda. Las licencias con caducidad obligan a los bibliotecarios a comprar por adelantado ebooks sin conocer su demanda real. En el caso de que los préstamos adquiridos no sean solicitados en el plazo de dos años, los ebooks desaparecen de la plataforma al término del mismo.
Algunos editores también están viendo cómo las licencias con caducidad reducen también el potencial de renovación de las licencias adquiridas o compra de novedades, dado que los bibliotecarios no compran más licencias hasta que se hayan consumido todos los préstamos con caducidad para garantizar la sostenibilidad económica del préstamo bibliotecario.
Esperamos que estas observaciones y sugerencias ayuden a consolidar los proyectos eBiblio y eLiburutegia, dado que consideramos que ambos son clave para garantizar a la ciudadanía un acceso permanente a la cultura y el conocimiento, así como para afianzar el papel de las bibliotecas públicas en la era digital.
Otros artículos relacionados con este tema