Ética en el nuevo mundo de la inteligencia artificial
A raíz del crecimiento de la robótica y la inteligencia artificial, varias organizaciones claman por poner atención a este crecimiento, proponiendo una ética necesaria en este campo que dé prioridad al bienestar humano en relación a estos sistemas autónomos.
Una de ellas es la IEEE (Instituto de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos), la organización profesional tecnológica más grande del mundo dedicada al avance de la tecnología para la humanidad, donde han publicado una guía sobre este propósito.
El documento ha sido creado por varios comités de la IEEE Global Initiative, integrada por más de cien líderes de pensamiento global y expertos en inteligencia artificial. Precisamente, la misión de la IEEE Global Initiative es asegurar que cada tecnólogo sea educado y capacitado para dar prioridad a consideraciones éticas en el diseño y desarrollo de sistemas autónomos e inteligentes.
En dicho informe piden que nos aseguremos de que estas tecnologías estén alineadas con los seres humanos en términos de nuestros mismos valores morales y principios éticos. Al alinear la creación de inteligencias artificiales con los valores de sus usuarios y de la sociedad se puede priorizar el incremento del bienestar humano.
Otro de sus objetivos es proporcionar recomendaciones para los Estándares IEEE basados en el Diseño Ético. El diseño éticamente alineado incluye ocho secciones, cada una abordando un tema específico relacionado con la inteligencia artificial, que ha sido discutido extensamente por un comité específico de la IEEE Global Initiative.
El ‘Comité de Principios Generales’ busca articular preocupaciones éticas de alto nivel que se aplican a todo tipo de inteligencia artificial y sistemas autónomos para incorporar los más altos ideales de derechos humanos que honren su dignidad y valores inherentes, así como para mitigar los riesgos y los impactos negativos a medida que inteligencia artificial evolucione como sistema socio-tecnológico.
Con ello pretenden que al identificar las cuestiones y las recomendaciones con respecto a estos principios, sirvan eventualmente para sostener y actualizar las normas y estándares futuros dentro de un nuevo marco de gobierno ético.