Juan Muñoz
Durante nuestro último viaje a Londres tuvimos la ocasión de visitar la retrospectiva más importante dedicada al artista Juan Muñoz en el Tate Modern de Londres . La muestra cuenta con más de 80 creaciones: esculturas, instalaciones, dibujos, obras radiofónicas y escritos, algunas nunca antes mostradas.
Durante casi veinte años Juan Muñoz creó, a través de su personal lenguaje, un corpus de una excepcional narratividad con referencias múltiples a la historia de la cultura occidental. Todas sus obras invitan al espectador a relacionarse con ellas, creando una fuerte sensación de aislamiento e introspección individual. Lo que se ve no es lo que parece: sus balcones deshabitados aluden a todo aquello que ocurre en el espacio que abarca la mirada; sus pasamanos sin destino llegan incluso a generar dolor y desasosiego al introducir elementos relacionados con la violencia como los cuchillos; la reminiscencia del Barroco se evidencia en los suelos ópticos que juegan con la arquitectura de Borromini en espacios tan significativos como la galería del Palazzo Spada de Roma, enmarcando y escenificando al personaje que los transita para hacerlo actuar; y las figuras suspendidas en el aire nos remiten a la trapecista de Edgar Degas, mientras que los grupos de personajes se contemplan como en el teatro de Máscaras Desnudas de Luigi Pirandello. Todas estas voces mudas, que intentan articular sonidos, crean un murmullo sordo que recorrerá los singulares espacios del Museo.
Tras su paso por el Tate Modern de Londres, esta exposición se trasladará al Museo Guggenheim Bilbao donde podrá ser visitada del 27 de mayo al 28 de septiembre.