Los editores europeos se resisten a los cambios

Algunos editores europeos se resisten más a adaptarse a los cambios que está sufriendo el sector editorial. Esta es una de las conclusiones del estudio publicado por la consultora Atkearney, donde se analiza la evolución del libro digital, los principales factores en torno a su crecimiento, los cambios en la cadena de valor y las diferentes tendencias en los Estados Unidos y Europa.

Al observar el impacto de la digitalización en la industrial editorial mundial, queda claro, como es de todos conocido, que en Europa todavía está en fase de inicio, mientras que en Estados Unidos ya se encuentran en el cuarto año de adopción de los libros electrónicos.

La brecha es evidente entre Estados Unidos y Europa, donde los principales motores industriales para su establecimiento no están todavía completamente desarrollados.  Por tanto, se espera que la penetración en Europa de los ebooks continúe siendo más lenta. La adaptación de la sociedad estadounidense a la tecnología, la mayor disponibilidad a los contenidos, mayor competencia y un menor proteccionismo y reticencias de los editores (señalan a España, Alemania y países Escandinavos como ejemplo de editores resistentes al cambio) sobre el libro electrónico son algunas de las razones por las que allí el crecimiento es más rápido.

Como en otras ocasiones se ha dicho, se espera que los libros digitales avancen hacia contenidos enriquecidos, multimedia, personalizados y a precios cada vez más competitivos. Por otro lado, los excesivos recortes de precios impuestos por grandes compañías como Amazon y las descargas ilegales, también son decisivos a la hora de adoptar soluciones y modelos de negocio específicos. Librerías y distribuidores son los más afectados en la cadena de valor tradicional si no se adaptan rápidamente al modelo digital. Las empresas tecnológicas de comercio online son la gran competencia de estos eslabones.

Una vez más, queda claro que, a pesar de la brecha entre los dos continentes -a la que parecen agarrarse algunos editores como argumento para no querer dar el paso-, lo cierto es que aquellos que retrasen demasiado su entrada en juego o no se involucren en los cambios que está sufriendo el sector, van a tener difícil su supervivencia. Antes o después.