La memoria de la cultura

Si las “Tiras de la Memoria” de Elisa Merino llevaran escritos los recuerdos del Palacio de la Mosquera hablarían de los trazos de Goya, de los pentagramas de Boccherini y de los miles y miles de legajos que el infante Don Luis de Borbón atesoró a lo largo de los años. En realidad la obra de la salmantina evoca otras miradas, otros sueños, los de viejos campesinos que colgaban sus mantas de los techos de una cueva como si fueran pedazos de vida para preservar sus vivencias.

Sin embargo tiempo y creatividad se han unido en una exposición de Arte Contemporáneo. Tiempo porque el espacio nos lleva a un templo de la cultura; un palacio erigido por un Borbón, hijo de Felipe V, en el que se respiraba el arte, en el que las manifestaciones culturales y creativas hicieron en 1780 de este espacio un oasis adelantado a su tiempo. Y creatividad porque las manos y el alma de Elisa Merino han dado vida también a otros recuerdos que, en forma de tiras que cuelgan de los elevados techos, nos llevan a los tiempos de los aldeanos y sus mantas con las que se protegían de los fríos vientos castellanos.

La cita con la memoria y el tiempo es en Arenas de San Pedro. La villa de Ávila acoge el IV Festival Internacional de Arte Contemporáneo, un evento que asiste a su cuarta edición y en el que un total de 83 artistas de cuatro continentes se dan cita hasta el 30 de octubre para mostrar sus obras contemporáneas, en donde conviven las ideas, colores, formas, aprendizajes y sensaciones.

¡Ay de los pueblos que olvidan, pues están condenados a repetir! es la filosofía de este IV Festival. La memoria es la clave de este camino hacia el arte; una memoria no sólo visual y del espacio como nos propone Elisa Merino, sino que el recuerdo se moldea en lo personal, lo colectivo, lo cibernético, etc. Así, en la parte no rehabilitada de este palacio, sesenta y cuatro artistas reconstruyen y deshacen la memoria y la escriben en diversos soportes creativos.

Son 5.000 metros cuadrados de exposición en el que también las mujeres hablan, se expresan y viven el arte. En el espacio rehabilitado del palacio borbónico diecinueve creadoras de doce países de Europa hablan entre ellas en un diálogo artístico enfrentando sus obras en el espacio y en el tiempo. Es una exposición viajera que nació en  la Inselgalerie de Berlín y que ahora descansa en este palacio abulense.

El arte dialoga en Ávila hasta el 30 de octubre. Se cuentan historias del tiempo, del recuerdo y la memoria. Se cuentan y plasman sobre obras de arte que ligan íntimamente los sueños del Infante Borbón Don Luis con los anhelos y creaciones de unos artistas que buscan en el espacio de Arenas de San Pedro la misma inspiración que, al resguardo de un palacio de la cultura, encontraron en el siglo XVIII la paleta de Francisco de Goya y el chelo de Luigi Boccherini.