03 julio 2012

Los niños tienen más dificultades que las niñas para engancharse a la lectura

Una comisión para la lectura del Reino Unido acaba de sacar un informe sobre los problemas asociados a la lectura. Los resultados pueden ser en algunos aspectos extrapolables al estado de la lectura infantil en nuestro país, así como las recomendaciones generales que se dan en dicho informe con un enfoque, en parte, de género.

Este enfoque se debe a que se ha advertido desde hace tiempo que los resultados sobre el estado de la lectura son diferentes en los niños que en las niñas, con mejores resultados en estas últimas. La menor implicación de los niños en la lectura está resultando ser una tendencia internacional. En general, del 2005 al 2001 la lectura ha bajado en todas sus vertientes, sólo ha subido ligeramente en los mensajes de texto (61% a 63,9%), lo cual es bastante significativo.

Así, bajo este enfoque, destacan tres factores que inciden sobre el mayor o menor índice de lectura:

– La importancia del entorno familiar, donde las niñas tienen más probabilidades de tener acceso a libros y son llevadas a la biblioteca, y donde las madres son más propensas a apoyar la lectura de sus hijos.

– El entorno escolar, donde, en ocasiones, los profesores tienen un conocimiento limitado de los textos más actuales y atractivos para los niños y donde es posible que los niños puedan no tener la oportunidad de desarrollar su identidad como lectores a través de la lectura sólo por placer.

– Las identidades masculinas de género que no valoran el aprendizaje y la lectura como una marca de éxito. Esto es así ya que se ha advertido una brecha de género que comienza en el hogar, donde los padres fomentan la lectura de un modo diferente con los niños que con las niñas. A éstas se las involucra más en la lectura.

Las recomendaciones de la Comisión pasan por, como es lógico, el apoyo en las escuelas donde se creen lectores por placer. En esta dirección también deben de involucrarse a los padres para crear unas estrategias de lectura. Por otro lado, los profesores deben de estar al día de las novedades que puedan atraer a la lectura a los niños más desvinculados.

Del mismo modo, las bibliotecas tienen que trabajar estrategias para atraer a los niños, especialmente varones, con menos posibilidades de tener ese apoyo en casa. Unos y otros deberían encontrar algún modelo de lectura masculino para aquellos niños más reticentes a la lectura y cuyos padres no le dan un valor propio; esto incluye también apoyar la alfabetización de los padres. Por último, destaca la importancia del marketing social para alentar a los padres a apoyar la alfabetización de sus hijos.

A la luz de los resultados y viendo dónde están y cómo leen más los niños fuera de la escuela (webs, redes sociales, revistas, emails, letras de canciones), llama la atención que no se ponga mayor acento en la necesidad de incentivar la lectura aprovechando sus gustos y tendencias así como el uso de nuevas tecnologías (web, blogs, móvil, ebooks, redes), como se encuentra en las recomendaciones de otros estudios nacionales e internacionales.

Son recursos para incentivar la lectura y la comprensión que puede conducir a los niños al gusto por la lectura, en cualquier soporte, incluido el papel, si es lo que se quiere conseguir finalmente.

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