Odio el rosa. Libros juveniles y narrativa transmedia
Si hay un ámbito ideal para desarrollar narrativa transmedia ese es el de la literatura juvenil, donde el perfil lector está acostumbrado a tratar con las nuevas tecnologías y diversificar sus fuentes de ocio, información y comunicación a través de distintos medios y plataformas.
Así parece que lo han sabido ver Oxford University Press a través de sus libros bajo el título unitario ‘Odio el rosa’. La idea surgió -según nos cuenta Miriam Vázquez, su editora- como una reacción de los autores a la preocupante polarización de género que se da en la oferta editorial para jóvenes.
Frente a esta polarización, los autores concibieron una historia contada desde una doble perspectiva, la de una chica (Sara) y la de un chico (Dani). De este modo, los lectores querrían leer la versión de Sara, y las lectoras la de Dani.
La acción se desarrolla en un futuro relativamente próximo -mediados del siglo XXI- y describe un mundo en el que los problemas socioeconómicos actuales se han agravado hasta transformar la sociedad completamente. Un mundo donde el valor añadido que una persona puede aportar a una compañía no está en lo que produce, sino en lo que consume y en su capacidad de influencia en el consumo a través de las redes sociales.
La elección del multiformato transmedia se debe a su intención de atraer a los jóvenes -anclados a veces sólo en el mundo digital- hacia la lectura por placer. Así, se promueve la lectura combinando el formato libro con otras historias que se superponen a la principal y que se narran de manera discontinua a través de Internet y las redes sociales.
‘Odio el Rosa’ dispone de un foro y de cuentas en Facebook y Twitter donde los lectores pueden mantenerse informados acerca de las novedades relacionadas con la serie, opinar y participar en propuestas interactivas.
Además, su comunidad de lectores se ha animado a desarrollar sus capacidades creativas y de participación, implicándose de manera activa y compartiendo sus creaciones: desde merchandaising creado por ellos mismos, canciones, cómics, representaciones teatrales, nuevos capítulos, dibujos, propuestas de nuevos personajes, etc.
Se trata de una obra dirigida a un perfil lector de adolescentes entre los doce y los dieciséis años. Pero también los hay de once años y jóvenes de dieciocho o diecinueve años, o incluso madres, padres y profesores.
El objetivo último es utilizar el libro como herramienta de motivación para integrar otros contenidos de cualquier área en el proceso de enseñanza-aprendizaje.
En 2016 llegará la tercera y última parte de la saga cargada de muchas sorpresas.