08 enero 2019

Manifiesto en apoyo al sector editorial europeo

La Federación Europea de Editores ha querido comenzar este año 2019 con una serie de reivindicaciones para el sector. Reivindicaciones que han publicado en forma de manifiesto.

Para defender la labor de un sector que aporta creatividad, información, conocimiento, educación en un momento en el que parecen perder valor o atención frente a otros sectores económicos, y como pilar indispensable de la cultura e incluso de la economía del continente, este manifiesto propone un marco político “a escala” en la Unión Europea que haga aumentar las oportunidades del sector y multiplicar el valor que aporta a la sociedad.

Son 4 los puntos definitorios de este manifiesto.

  1. Mantener y reforzar el exitoso ciclo de creación, inversión e innovación.

Para ello se pide garantizar un régimen de derechos de autor sólido, especialmente fomentando las diferentes licencias, respaldando así la creación y la inversión. También la aplicación en toda la UE de las mismas tasas de IVA reducidas o nulas a los libros, revistas y materiales de aprendizaje, independientemente del formato o producto que elija el lector, para poner fin a la discriminación injustificada entre las publicaciones digitales e impresas. A su vez, focalizar la financiación para el sector cultural en áreas no cubiertas por el mercado, como la capacitación y movilidad de profesionales, y el apoyo a la innovación, accesibilidad, así como a la investigación y el desarrollo a través de proyectos colaborativos relevantes.

  1. Mantener y desarrollar aún más este sector vital y su liderazgo mundial.

La UE debería, en estrecha colaboración con sus Estados miembros, participar activamente en iniciativas de promoción de la lectura que alienten a todos los ciudadanos a aprovechar los numerosos beneficios de los libros y la lectura. La UE debería adoptar políticas que multipliquen los beneficios de un sector editorial sólido y diverso.

  1. Garantizar que los derechos fundamentales que sustentan la edición permanezcan en su lugar.

Para ello sería necesario apoyar incondicionalmente la libertad de expresión y de edición/publicación. Habría que evitar entonces las restricciones innecesarias así como la interferencia de los Estados en la creación de contenidos educativos de calidad. Respetar también el derecho de los docentes a elegir métodos y materiales de enseñanza que coincidan con su público objetivo y los planes de estudio. Fortalecer además el pluralismo en la cultura y la educación, y combatir la censura y la imposición de políticas de libros de texto únicos.

  1. Crear un campo de juego realmente nivelado.

Para lograrlo habría que estimular la competencia, reconociendo que la fijación de precios no es el único criterio para evaluarla. Mitigar también los efectos de las posiciones dominantes en el mercado online y, a su vez, asegurarse de que todos los agentes paguen su parte correspondiente de impuestos. Fomentar la interoperabilidad de contenidos y plataformas, evitando encerrar a los consumidores en sistemas propietarios junto a favorecer la portabilidad del contenido en todas las plataformas. Establecer, en fin, un régimen de cumplimiento sólido para evitar la competencia desleal de plataformas que ofrecen contenido sin remunerar a los autores y editores.

La Federación de Editores Europeos ha redactado este manifiesto para delinear las áreas en las que los responsables políticos de la UE puedan garantizar que el sector editorial europeo siga siendo un “faro de excelencia” y continúe innovando y beneficiando a todos los ciudadanos.

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