Peer to Peer en el sector editorial
Hace unos días, Joe Wikert reflexionaba en su blog el modelo Peer to Peer en el sector editorial, todo a propósito de las capacidades tecnológicas de conexión entre diferentes dispositivos gracias, por ejemplo, al Bluetooth. Reflexión de la que también se hicieron eco en Digital Book World.
Básicamente, la reflexión viene a señalar cómo un sector se puede valer de la tecnología en lugar de enfrentarse a ella por algún prejuicio, en este caso, por la relación de un sistema tecnológico que permite compartir datos abiertamente, no siempre, ni mucho menos, de manera ilegítima.
El modelo P2P, efectivamente, va mucho más allá de la piratería. Si bien ya hubo intentos por parte de alguna de estas plataformas P2P de adentrarse en el negocio de los ebooks, como fue el caso de Bit Torrent, quienes llegaron a comenzar un plan de distribución de libros digitales, dentro del programa de BitTorrent Artist Spotlight. En el caso de los libros de papel también hay un modelo Peer to Peer.
Para huir de este tipo de plataformas sospechosas y acercarnos a entornos más amables desde el punto de vista legal, recordemos que en el plano educativo y de las publicaciones científicas el P2P tiene sus ejemplos en lo que se ha denominado “Peer Review”, que hace referencia a la revisión por una o varias personas del trabajo de investigación para publicar por algún autor.
Luego llegaron otros ejemplos que se basan en el mismo concepto, como la Universidad Peer to Peer, dentro del marco de una educación online abierta y colaborativa.
Wikert pone más el acento en el propio origen tecnológico del Peer to Peer en cuanto a conexión de redes, más que en el concepto que han heredado casos como los que acabamos de mencionar.
Su propuesta es aprovechar el mercado local, cercano, gracias a la posibilidad de intercambiar documentos y archivos (ebooks) para promocionar o hacer descubrir lecturas, bien facilitando extractos, bien buscando nuevas formas de distribución vía, wifi, bluetooth o incluso beacons basadas en la proximidad y en la confianza, gestionada por las propias editoriales.
Puede ser una propuesta viable. La tecnología, incluso alguna que ha adquirido mala fama, más allá de su verdadera naturaleza, está para utilizarla en favor nuestra, para hacerse con ella.