23 mayo 2013

Nuevos cargos en el sector cultural: director de Aplicaciones

De un modo u otro, las aplicaciones forman parte de la gestión de contenidos de toda entidad.

Bien sea en forma de aplicación nativa, para facilitar información, acceso, catálogos, lectura, los propios contenidos (libros, imágenes, películas), las aplicaciones están ocupando un espacio lo suficientemente importante como para que haya alguien encargado de dirigir, coordinar, pensar y estar al día de la evolución, funciones y recursos a explotar posibles con esta tecnología.

Venimos señalando a propósito de este viraje hacia lo digital, sobre la importancia de las nuevas y necesarias habilidades de editores, responsables de exposiciones, directores de museos, etc. O, en su defecto, de alguien que se responsabilice de la gestión y conocimiento -para luego compartirlo con el resto del equipo- de las nuevas herramientas tecnológicas. Hace unos días, un extenso artículo en The Next Web se hacían esta misma pregunta sobre la necesidad de crear nuevos puestos, como, por ejemplo, el director de aplicaciones, o similar.

El conocimiento directo de sus funcionalidades, de las capacidades en diseño e interacción, va a ser cada vez más importante. Una vez una tecnología alcanza la importancia suficiente es importante comenzar a tomar las riendas de su funcionamiento y no sólo –aunque también- confiar en el trabajo de otros.

Es cierto que existen directores, coordinadores o responsables de estrategia digital –poco importa el término, sigue siendo igualmente general- pero pocas instituciones tienen a alguien dedicado plenamente a esta parte del trabajo digital. Por ejemplo, en el ámbito museístico, el Smithsonian cuenta con Nancy Proctor, que hace este tipo de labor. Pero no recordamos muchos casos más tan específicos.

El sector cultural, en cuanto que gestores de experiencias, se debe abrir a nuevas habilidades, traducidas en cargos que surgen que surgen a raíz de la irrupción de Internet en su labor diaria. Y estos cargos los pueden tener fácilmente en su entorno, donde las ideas sobre y conocimiento de su ámbito (literatura, arte, cine, documentación, etc.) puedan ser llevadas y contadas a través de las aplicaciones.

16 Responses

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