24 julio 2013

La llegada de las tecnologías emocionales

Poco a poco y, sobre todo, con la llegada de los soportes móviles, van apareciendo o anunciándose la llegada de nuevas tecnologías de carácter emocional. La universalización del uso del móvil –en concreto los smartphones- hace que sea éste el foco donde implementar este tipo de tecnologías.

En la Universidad de Cambridge han desarrollado una aplicación con la que se pretende localizar el estado de ánimo, el nivel de satisfacción o felicidad, combinando algunos datos recogidos en el uso del teléfono móvil. Es decir, EmotionSense –que así se llama la aplicación- recopila información del usuario durante la navegación y otras fuentes de información del Smartphone (todo bajo el consentimiento del dueño), junto a otros datos que quiera introducir el usuario, para dar un informe del estado emocional de su dueño. En diferentes momentos del día, la aplicación envía una notificación a los usuarios preguntándoles acerca de su estado de ánimo.

No es la primera aplicación ni uso tecnológico que se crea en esta dirección, unas con un carácter más lúdico, otras, como ésta, como parte de un proyecto mayor para saber hasta dónde se pueden utilizar estos soportes para mejorar la salud y prevenir estados de malestar. La combinación del uso de inteligencia artificial y tecnología doméstica está evolucionando hacia lo que ya se denomina “computación afectiva”. Una computación que será capaz –dicen- de adelantarse a nuestras emociones.

Esta clase tecnología emocional puede tener variados usos en el día a día. Pueden hacer que nuestros procesos de búsqueda de información o compra sean cada vez más acertados, incluso divertidos en el mismo proceso de descubrimiento. Un recurso para la interacción con el que quizá podamos, por ejemplo, elegir un libro o asistir a un concierto o exposición según su argumento o semántica, el programa e instrumentos o movimientos, escuela artística o colores, respectivamente.

Hay quien esto le parece una fantasía, a otros les asusta que unos simples aparatos o Internet pueda saber tanto de nosotros mismos pero, ¿a vosotros, qué opinión os merece, lo disfrutaríais?

6 Responses

  1. Yo lo veo muy interesante, voy a ver la aplicación con más detenimiento, de alguna manera se trata de aunar las diferentes fuentes posibles de captación de info de la actividad del usuario. hay aplicaciones disponibles que van más allá y monitorizan la actividad fisiológica de los usuarios (p.e. captan un cambio emocional a partir del cambio de temperatura corporal), es lo que se está llamando quantified self. Saludos.

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